Ya es oficial lo que todo el mundo sabía. Salvi deja el Cádiz CF tras siete temporadas, en las que se ha convertido en una leyenda del cadismo.
Llegado en la campaña 2015-16, no puede entrar con mejor pie, formando una sociedad diabólica con Alvaro García (los dos bajitos de las bandas) y siendo un futbolista imprescindible para conseguir el retorno al fútbol profesional.
Fútbol en el que se desenvolvería a las mil maravillas. En cuatro campañas en Segunda, en tres de ellas estuvo a un nivel inmenso, con especial atención a la más importante, la del ascenso a Primera, en la que fue particularamente importante, pese a no marcar goles.
En Primera volvió a dar otro salto de calidad, y siguió aportando su velocidad por momentos insultantes por como debaja a sus rivales atrás. En el segundo año perdió importancia en el equipo, especialmente cuando llegó Sergio González, pero su aportación para las dos permanencias es indiscutible.
El sanluqueño se marcha como mito del cadismo, entre los 20 jugadores (de hecho ocupa el puesto 16) de la historia del club que más partidos oficiales han dispustado con esta camiseta. No podemos más que desearle toda la suerte del mundo en su nueva etapa, donde se reencontrará con su amigo de travesuras, el mencionado Alvaro García.
Foto: La Voz