El jugador más grande de nuestra historia, Mágico González, ha recibido una buena noticia esta semana. Al astro salvadoreño, que ya ha recibido varios reconocimientos por parte de su país (como el de Hijo Meritísimo que le fue concedido en 2013), le ha sido concedida una pensión vitalicia por parte de los diputados del país centroamericano, que acordaron que el Mago reciba dos veces el salario mínimo de dicho país.
El gobierno reconoce así la figura del futbolista como uno de los hijos predilectos de su país.