Internacional sub17 con Nigeria, ganando el Mundial de dicha categoría.

Jugador tendente al sobrepeso, en pretemporada despertó algunas suspicacias por su estado físico y su peso. Pero lo cierto es que durante la temporada tapó la boca a todos los que dudaron de él entonces.

En la temporada que estuvo, fue pichichi del Cádiz (13 goles en liga) y eso que apenas llegó a los 2000 minutos, por las continuas rotaciones que hacía Jose González en la delantera con él, Dioni y Juanjo, de características tan distintas entre sí.

Su principal baza era su velocidad. Muchos de sus goles los marcó gracias a que le ganaba la espalda a los defensas contrarios. Habilidad que explotó al máximo en el campo del Almería B: aquel día el nigeriano hizo un hat-trick en 45 minutos que dejó el encuentro liquidado.

Eso sí, mejor no dejarlo tirar penalties, habilidad por la que no será recordado: falló los dos que tiró en la temporada: uno en Lepe, con el campeonato conseguido, para intentar erigirse como pichichi del grupo IV, y otro en la fatídica y decisiva tanda frente al Lugo (lo lanzó especialmente mal, casi sale de banda), que nos condenaba a continuar otra campaña en la categoría maldita.

Foto: portalcadista.com