Hace un año el jugador navarro llegaba a Chipre para jugar en el Apollon. Le costó adaptarse al clima (la humedad y el calor obligaban a entrenar a las seis y media de la mañana, con pérdidas de hasta 4 kilos por sesión), pero poco a poco se fue haciendo.
El centrocampista ha sido un futbolista importante en el cuadro chipriota, en el que ha jugado 25 partidos de liga, casi 1800 minutos y anotado un gol. Además, jugó diez partidos en copa, en la que su equipo perdió la final por penalties, frustrando además la entrada en competiciones europeas.
El Apollon se encuentra en pleno proceso de renovación, empezando por la directiva, y hay muchas esperanzas de que este año sí accedan a UEFA, proyecto para el que el excadista sigue contando