Estuvo tres temporadas en el equipo amarillo, dejando una impronta imborrable. Detrás de su endeble físico, se escondía un jugador de una calidad técnica extraordinaria, que dejó algunos de los mejores momentos de fútbol que hemos vivido en la última década.
Malvendido a mitad de la campaña 07-08 (seguramente que con él, no se habría producido ese descenso en Alicante del que tanto estamos hablando estos días), se marchó a México, donde ha estado hasta ahora. Primero en el equipo de Trigres, y a continuación, en Toluca.
El equipo auriazul ya le comunicó que no cuenta con él, y según publica el diario Don Tachón, el delgado mediapunta habría regresado a Argentina, donde sopesa ofertas donde retirarse, o incluso, si no le sale nada, colgar ya las botas (cumplirá 35 años este verano).