Jugador cadista de no precisamente gran recuerdo para la afición amarilla (su paso por Carranza fue meramente anecdótico), se marchó como todos recordarán, a Cerro Porteño, de su país natal.
El jugador no tuvo muchas oportunidades tampoco en su nuevo club, pero aún así, continuará en la entidad azulgrana, por lo menos, hasta que finalice el presente año. Curiosamente, tendrá de compañero al jerezano Dani Güiza, rutilante nuevo fichaje de la escuadra paraguaya