Ingresa en el club en la temporada 1969-70 como infantil y permanece en él hasta la temporada 1976-77, como jugador del Cádiz B, tras la que se retiró muy joven por causas que ahora desarrollaremos.

Siendo aún juvenil, en la campaña 72-73, es cedido al Balón de Cádiz. Es en el conjunto de Pedro Fernández donde Tivo sufre una grave lesión de rodilla, de la que nunca terminaría de recuperarse y que más tarde haría que abandonase la práctica deportiva prematuramente.

Tivo, a pesar de no haber disputado ningún partido de liga, debuta con el primer equipo con 16 años, jugando un partido de la Copa de Andalucía contra el Recreativo de Huelva en el estadio Colombino (1-1 con gol de Garrido I), formando en el centro de la defensa con Moreno y sentándose en el banquillo de entrenador Adolfo Bolea, entonces segundo, de García de Andoain.

Desde entonces, Tivo participa en numerosos partidos amistosos y en la Copa de Andalucía, siendo su último encuentro con la camisola amarilla a finales de la temporada 76-77, contra el Real Betis en Carranza (victoria cadista por 3-0, dirigidos por el entrenador Enrique Mateo).