Visto y no visto. Como tantísimos otros canteranos, el periplo de Juanfran por el primer equipo cadista fue muy breve.

Tras destacar en los equipos de su Lebrija natal (Antoniano y UB Lebrijana), el mediocentro ingresa en el filial amarillo, en el que está temporada y media. 

En su segunda campaña en la Tacita, llama la atención ya de los técnicos, que le dan algunos minutos con los mayores: primero Claudio en Copa en el intrascendente partido de Vigo (de forma que así ahorraba kilómetros a los veteranos que tenían que jugar en liga) y luego Alvaro Cervera, que lo citaba también para el último partido de liga en Jaén, en el que tampoco hay nada en juego.

Pocos días después del mismo, sin embargo, el sevillano se marchaba al Sanluqueño, con el que jugaría la fase de ascenso a Segunda B.